Leo es un signo de fuego que suele mostrarse confiado y seguro de sí mismo. Pienso que Leo es como el Sol, que irradia energía a los demás (entusiasmo, generosidad, calidez) y a la vez centraliza la atención, en un doble movimiento partiendo de él hacia el mundo externo, y viceversa. Ya que Leo suele liderar la acción, está atento a las respuestas de los demás frente a sus iniciativas, y le importará sentirse reconocido. Como todo signo de fuego Leo es audaz, creativo, suele moverse por la vida con optimismo, y espontaneidad, despertando en los otros esa “llama interior” que todos llevamos dentro. De ahí que se asocie este signo a líderes carismáticos, ya que su autoridad natural, fuerte presencia y su dramatismo, no suelen pasar desapercibidos. Esta firmeza puede volverse un problema cuando sus peores enemigos (el orgullo, la vanidad) toman la escena. Entonces deberá desandar el camino, para aprender a reconocer que todos nos equivocamos alguna vez, inclusive él mismo.
Creo que Leo, en definitiva busca descubrirse a sí mismo, encontrarse a sí mismo, y en esta búsqueda muchas veces estará pendiente de la mirada de los otros, admiración o no, buscando responder a la pregunta “¿Quién soy?”. Cuando lo logra su creatividad puede llegar a ser ilimitada.
Algo interesante es que no se motivará sólo a sí mismo, también sabe cómo motivar a los otros. Aunque no es un signo de estrategias (tal como el fuego no conoce el frío), su espontaneidad y espíritu de juego suele guiarlo. Sin embargo, otras veces esta falta de planificación frente a sus grandes metas, puede llevarlo a subestimar los pormenores y detalles, y a no ser muy realista en sus planes.
Leo es un signo pasional, en sus vínculos afectivos suele ser leal por sobre todas las cosas, generoso y protector. Sabe escuchar a su corazón y expresar sus sentimientos, exhibe su interés y destreza en las áreas expresivas, como el arte, la oratoria.
Cuando llega al punto de estar tan centrado en sí mismo, sin ponerse en el lugar de los otros, puede pecar de soberbia. El exceso de autoconfianza, puede incluso llevarlo a decepciones. A veces las decepciones ocurren debido a sus altas ambiciones y expectativas. Después de todo algo es claro, Leo, como el Sol, su planeta asociado, gusta de hacer las cosas a lo grande, y no se anda con minucias o detalles. Por otro lado, el Sol, también se asocia con la vitalidad física, lo cual se relaciona directamente a Leo, ya que es un signo muy vital y con gran caudal de energías (de él dependerá en qué las invierta).
Famosos de Leo (o con planetas ubicados en el signo de Leo):
Stanley Kubrick, cineasta: Sol, Venus y Neptuno
Bill Clinton, político: Sol, Mercurio, Saturno y Plutón
Carl G. Jung, psicólogo: Sol y Urano
Barack Obama, político: Sol, Urano, Mercuro y Nodo Norte
